Interpretar el patrimonio
"La interpretación no es instrucción, es provocación" (Tilden,
1957).
Provocar, evocar algo en el visitante, producir curiosidad, ganas de
aprender, invitarle a que se deje seducir por los monumentos o las historias
que estamos contando.
Lograr conectar con el turista no es tarea fácil, pese a que es o debería
ser uno de los objetivos principales de cualquier actividad turística.
Por el contrario, hoy en día, este fin se confunde entre las posibilidades
casi infinitas que se ofertan a quien viaja y las inquietudes ilimitadas de
cada turista.
Ante esta situación, con una oferta turística saturada y una demanda por
parte del turista de actividades cada vez más amplia y personalizada, el éxito
del viaje estará en lo memorable que sea la experiencia.
"La interpretación del patrimonio es aquel conjunto de métodos y
técnicas de comunicación que se utilizan para revelar el
significado de un lugar que es visitado por el público (Guerra, Morales y
Serantes, 2009, p. 4).
La característica más importante de la interpretación del patrimonio es que estimula activamente a los participantes a interpretar sus experiencias, es decir a buscar un sentido más profundo detrás de los hechos (Larsen D.L, 2011).
Son muchos los autores que han definido este concepto, en parte debido a que uno de sus "padres", Freeman Tilden, no quiso establecer una definición inmutable.
La característica más importante de la interpretación del patrimonio es que estimula activamente a los participantes a interpretar sus experiencias, es decir a buscar un sentido más profundo detrás de los hechos (Larsen D.L, 2011).
Son muchos los autores que han definido este concepto, en parte debido a que uno de sus "padres", Freeman Tilden, no quiso establecer una definición inmutable.
Tilden (1883 - 1980), fue escritor y columnista de periódicos.
Recorrió varios parques para escribir sobre el Sistema de Parques
Nacionales de Estados Unidos, interesándose por la calidad de los
programas interpretativos (Guerra et al., 2009). Este interés lo
llevó a escribir su libro fundamental: “La Interpretación de nuestro
Patrimonio”, publicado en 1957, donde esboza los principios de la
interpretación: "Cualquier interpretación que de alguna forma no relacione lo
que se muestra o describe con algo que se halle en la personalidad o en
la experiencia del visitante, será estéril".
Para Harold Wallin (1965) por ejemplo, la interpretación, es
ayudar al visitante a sentir algo que el intérprete
siente: sensibilidad hacia la belleza(...), un sentido de asombro y
un deseo de saber. Debería ayudar al visitante a sentirse como en casa en
el medio ambiente. Debería ayudar al visitante a desarrollar esa
percepción.
Samuel Ham (1992) concreta diciendo que la interpretación difiere de otras
formas de transmisión de información en que es amena, relevante,
organizada y tiene un tema (se refiere a ideas o
conceptos universales que clarifican nuestra explicación). La interpretación
implica la traducción del lenguaje técnico de las ciencias
a términos e ideas que la gente que no es especialista los pueda
comprender fácilmente.
Colectivo mediarte en una intervención teatral en La Floresta (Quito)
|
¿Cómo
interpretar?
El conjunto de recursos es muy amplio por lo que sólo podremos aquí resumir
algunas ideas. No debemos olvidar que cada visita es única(porque cada
grupo es único) y las técnicas deberán por ello adecuarse a cada situación.
Los visitantes siempre buscan algo que sea valioso para ellos mismos. El
desafío será conectar estas inquietudes, con
los significados que posee el recurso.
La mejor manera de revelar significado es explorando una idea (Guerra
et al., 2009), por ejemplo, yendo de lo particular a lo general, enlazando por
el camino con la experiencia del visitante.
Nuestro discurso tiene que ser inclusivo: la incorporación
de múltiples puntos de vista permite que el producto "sintonice" con
un mayor número de visitantes.
Debemos hacerlo atractivo, sea cual sea la técnica escogida
(esto también aplica para los paneles explicativos o cualquier recurso
empleado).
Por último, es también indispensable promover la participación: esto
tiene que ver con nuestra forma de aprender y recordar, estando demostrado
científicamente que nuestro aprendizaje es mucho más potente cuando
experimentamos o somos partícipes de algo.
Involucrar a las partes, tanto público como residentes locales, será un concepto clave.
Involucrar a las partes, tanto público como residentes locales, será un concepto clave.
La interpretación como
una opción para el turismo sostenible
Una vez que se crean este tipo de experiencias en la visita, una vez que el
turista se siente partícipe, se está creando un vínculo entre el visitante
y lo que descubre (InHerit, s.f), favoreciendo un clima de convivencia, de
respeto, un sentido de apropiación, algo que es oro en tiempos de grandes
cruceros y turismo de consumo.
Contar con los residentes locales, que a menudo quedan fuera (más allá de la compra de souvenirs) será sinónimo de experiencia y autenticidad, aportando un valor añadido incalculable, pero además, recordemos que son ellos los que al final conviven día a día con el monumento o el enclave turístico, y sólo haciéndoles partícipes conseguiremos que sean también sus principales custodios.
Contar con los residentes locales, que a menudo quedan fuera (más allá de la compra de souvenirs) será sinónimo de experiencia y autenticidad, aportando un valor añadido incalculable, pero además, recordemos que son ellos los que al final conviven día a día con el monumento o el enclave turístico, y sólo haciéndoles partícipes conseguiremos que sean también sus principales custodios.
Referencias
Guerra, Francisco., Morales, Jorge., Serantes, Araceli. (2009). Bases
para la definición de competencias en Interpretación del Patrimonio. Seminario
Permanente de Interpretación del Patrimonio. Centro Nacional de
Educación Ambiental - CENEAM, España.
Ham, S.H. (1992). Environmental interpretation: A practical guide
for people with big ideas and small budgets. Golden, CO: North
American Press.
InHerit. (s.f). Introducción al desarrollo profesional en la interpretación
del patrimonio.
Larsen, D. L. (ed.)(2011). Meaningful Interpretation. 2.a ed.
Fort Washington: Eastern National.
Tilden, F. (1957). Interpreting our heritage. Chapel Hill, NC:
University of North Carolina Press. (En castellano: La
interpretación de nuestro patrimonio. Asociación para la
Interpretación del Patrimonio (ed.). Primera edición en castellano.
España, 2006).
Wallin, Harold. (1965). Interpretation: A manual and survey on establishing
a naturalist program. In Management Aids Bulletin No. 22
of American Institute of Park Executives. Arlington, VA: National
Recreation and Parks Association.
La interpretación del patrimonio es un tema muy amplio y diverso y en el caso del Ecuador aún en proceso de gestación. Necesitamos mejorar la calidad de nuestros mediadores y guías de Turismo, pues las nuevas generaciones que están saliendo de institutos tienen muchos vacíos y falencias. Me parece que tu artículo es una perfecta introducción que abre pie al análisis y debate sobre la revalorización de los patrimonios, sea a través de la mediación, del teatro, de la danza, de experiencias lúdicas, etc.... excelente como siempre y orgulloso de tus logros.
ResponderEliminarEl espíritu del turismo se desvirtúa cada vez más, y se ha convertido en un conjunto de actividades de ocio y espectáculo, lo que queda evidente de manera brutal en los cruceros mastodónticos, donde más del 80% del tiempo, los pasajeros pasan en el barco. Deben plantearse opciones para todos los gustos. Para los que nos interesa descubrir nuevos mundos geográficos y arquitectónicos, la emoción de lo auténtico, el contacto con los nativos, el sumergirse, aunque sea poco tiempo en el hábitat local, es importante preservar el turismo como una experiencia enriquecedora y de aprendizaje.
ResponderEliminarRecuerdo con gratitud la experiencia en la isla de Taquile en el lago Titicaca, donde nos quedamos a dormir en una cabaña, hospedados por una familia local. Hace más de 30 años de aquello y lo tengo grabado a fuego, de ahí la importancia de implicar a la población nativa.
El factor ecológico cada vez cobra mayor importancia, y hay que tenerlo muy en cuenta. Un crucero trasatlántico contamina diariamente el equivalente a un millón de coches.